Garantizar la guarda, custodia y seguridad psicofísica de los detenidos durante su estado de detención para el caso de internos procesados, y asimismo garantizar la ejecución del tratamiento penitenciario para aquellos internos condenados.
Adoptar estándares de seguridad, métodos y procedimientos eficaces para la prevención y resolución de conflictos entre los internos alojados.
Velar y garantizar por el efectivo cumplimiento de las normativas legales que regulan las actividades desarrolladas por las personas privadas de libertad.